Una Nochebuena con las primeras 300 mil dosis de la Sputnik V en la Argentina parece haberse convertido en la premisa del Gobierno para las gestiones contrarreloj con las autoridades rusas que incluyen un vuelo de Aerolíneas Argentinas pautado para este martes mismo, pero reprogramado por la tarde, con destino a Moscú y su regreso el jueves.
A falta de la última confirmación, que depende de la presentación de papeles y documentos comprometidos por parte de los funcionarios de la Federación Rusa, en el Ejecutivo manejan una segunda alternativa que salvaría el propósito original con la partida del Airbus 330 en la madrugada del miércoles con chance de retorno al día siguiente. Ese programa cuenta con la chance de iniciar el proceso de vacunación el lunes que viene entre personal de salud de las provincias.
La operatoria, que trabajan en conjunto el Ministerio de Salud y Aerolíneas Argentinas junto con autoridades del rubro de la aviación, tiene como fin la puesta a disposición de la droga rusa lo antes posible y, de paso, salvar un propósito enunciado en varias oportunidades por Alberto Fernández: el arranque de la vacunación antes de fin de año. El mayor problema para el cumplimiento de ese objetivo es que no depende sólo de la Argentina sino que aguarda el dictado de un decreto del gobierno de Vladímir Putin para autorizar la salida de esa partida de la vacuna de su país.